Fotos Inmóviles
Te compras una cámara réflex de la leche y resulta que como el móvil es más ligero y no saca tan mal, te apuntas al invento de la fotografía portátil para inmortalizar el momento. Metes esos instantes escurridizos dentro, in, del móvil. Así, las fotos son inmóviles y quietecitas. Ideales para guardar o compartir a través de Internet. Y, además, tu cámara, que siempre está en el bolsillo, te sirve para llamar y hacer vídeos, esas fotos en movimiento. La leche.
Las últimas luces del día, y las primeras de la noche
9 Nov. 2022
El Reino de Navarra, tierra de diversidad
Hemos puesto las fotografías e impresiones de nuestras vacaciones en Navarra. Espero que las disfrutéis.
Hemos utilizado la aplicación Power Point guardada como vídeo, pero todas las fotos se han tomado con un móvil, un S10 de Samsung. De banda sonora, el disco Fahrenheit de Toto, de 1986.
Agosto. 2019
Hemos utilizado la aplicación Power Point guardada como vídeo, pero todas las fotos se han tomado con un móvil, un S10 de Samsung. De banda sonora, el disco Fahrenheit de Toto, de 1986.
Agosto. 2019
Llueve Junio 2019
Santander Junio 2019
Valencia 2050
29 Nov. 18
Hay centros comerciales, donde ya es primavera, mientras los demás seguimos en invierno. Algo parecido sucede en Valencia. Donde ya es el futuro, y hay edificios siderales recostados sobre el césped. Construidos con luz, color y ausencia de rectas. Más que edificios, parecen naves espaciales, que en cualquier momento pueden despegar a las estrellas. Girando un poco la vista, se puede ver Gotham, la ciudad de Batman. Con rascacielos trazados con pintura azul fluorescente, y unos coches que huyen desesperadamente sin tener muy claro en qué dirección. No muy lejos, hay unas casas sumergidas en un lago, que se reflejan en el aire de la ciudad, en las trazas del humo de las Fallas que nunca acaba de irse, y donde un habitante de otros mundos se pasea, sin que nadie se gire a mirar, porque ya se han habituado a su presencia. Un poco más allá, hay un oasis desierto, dentro del pulmón verde de la ciudad que es el Jardín del Turia. Esos más de siete kilómetros de parque urbano, para escapar del tráfico, pasear, andar en bici, o sentarse a descansar. En esta ciudad moderna, sorprende encontrarse con un puente de piedra con aroma de sal, que siguiendo el camino correcto, puede servir de pasarela para llegar a la catedral. Al fin y al cabo, incluso las ciudades del futuro tienen un pasado, y por supuesto un presente, que tienden a entrelazarse y llevarse bien.
¿A Jaén de vacaciones, pero, qué hay ahí?
He estado una semana de vacaciones en Jaén, una ciudad maravillosa. Pero, he tenido que oír varias veces la pregunta de por qué ahí. Y lo entiendo. No es una de esas ciudades bandera de Andalucía, pero tiene una calma que me encanta, la cercanía a Granada y Córdoba que adoro, bastante que ver y es siempre un lugar acogedor, al que regresar cuando el ruido de otras plazas te satura, y te apetece estar a gusto.
Agosto 2018
Jaén: bienvenido a la calma
Baeza: con los pies en la tierra
La primera impresión, es la que perdura. Y aunque la cambiemos con el tiempo, siempre está ahí. Mi primera impresión al ver Baeza, es la de un pueblo grande, con dinero, y orgulloso de su pasado, pero más apegado a su presente. Influye aparcar junto a la plaza de toros, que acababa de suspender la corrida por lluvia, y ver los actos de las fiestas, que priorizaban el desfile festivo a los monumentos renacentistas patrimonio de la humanidad.
Úbeda: si Sabina eligió nacer aquí es por algo
Fue la primera ciudad de Jaén que vimos. En parte por aprovechar el viaje desde Santander, en parte por que hasta las 8 de la tarde no teníamos el apartamento libre. Nos atrajo la etiqueta de Patrimonio de la Humanidad, que Úbeda ostenta por sus edificios renacentistas, y nos encantó por lo agradable de pasear por sus calles. Si Sabina nació aquí, es por algo.
Córdoba: Mezquita-Catedral, patios, restos romanos y más
Contando las fotos de las vacaciones, la ciudad que captó más atención de la cámara fue Córdoba. Ver la Mezquita era un deseo personal y me emocioné al entrar. Es un espectáculo ver cómo hay tanta gente, de distintos países y confesiones, admirando el edificio. ¿El resto de la ciudad?, una maravilla. Casas blancas con los marcos de las ventanas en ocre, calor y lugares donde combatirlo, y espectáculos de flamenco para turistas, pero con músicos de verdad y que defienden con dignidad esta música de raiz
Agosto 2018
Dos ciudades: Granada y la Alhambra
En las vacaciones he podido disfrutar de Granada. Una ciudad preciosa y vital que son en realidad, como mínimo, dos ciudades. La moderna, que hace bandera del bienvivir y las tapas, y la que fue, con la Alhambra como cima. Ese entorno palaciego que transmite hoy la altísima calidad de vida de sus moradores, el gusto por la belleza y el poderío para hacer realidad sus deseos.
Agosto 2018
50 instantes de Oporto, Portugal
14 May 18
Avenida Boavista, viva y en movimiento
14 May 18
Las ciudades están vivas. Su respiración, latido y movimiento a veces es imperceptible, pero en ocasiones, y en algunas de sus calles, se puede oír con claridad. Si se presta atención, se escucha el corazón de los edificios palpitando lento; se ve con nitidez el cambio pausado de las casas, que nacen y mueren. Con el ritmo quieto de la piedra, de los jardines con verja, y con el hormigon armado de paciencia, que se va convirtiendo en el nuevo señor de la calle sin ninguna prisa. Las ancianas viviendas, miran con envidia a los jóvenes edificios, con sus espaldas rectas y sus fachadas sin arrugas. En la avenida Boavista de Oporto, en Portugal, el cambio a cámara lenta se toca, se ven los humos y aromas de las cocinas tapiadas, y se sienten las maneras educadas y antiguas que antes y ahora perduran, esas que hablan con voz templada y acaban con un gracias.
Pasear por la Avenida Boavista, es pasear por su historia, por sus cambios. Por sus hitos y sus fracasos, sus luces y sus sombras, sus grandezas y miserias. Una ciudad antigua como Oporto, en Portugal, ha sido testigo de muchos cambios y espera que haya más. Porque sabe que las ciudades cambian, mutan, se transforman al ritmo de los tiempos, bailan la música que las circunstancias tocan. Sabe que las ciudades nacen y mueren, y que ese ritmo es silencioso en algunas calles y sonoro en otras. En la Avenida Boavista este juego entre vida y muerte, entre construir y demoler, se ve. Es también, un ejemplo, una radiografía precisa, sobre cómo funciona el ritmo de una ciudad, sobre cómo se construye, sobre cómo cambia. En Boavista aún vive un palacete rosa, al lado de una casa deshabitada, abandonada y desahuciada, con las ventanas tapadas que le quitan la luz y el aire y la ahogan. A los lados de ellas, edificios más modernos. A su alrededor, el tráfico ligero y las personas que esperan en la parada del autobús, o caminando quizá al trabajo o a ninguna parte. Hay otra casa, que anuncia un papel fundamental para la humanidad, en su fachada se puede ver un enorme anuncio de papel higiénico. En 4D, con fondo rojo, y con un texto mágico. El comercial quizá podría pagar el aislamiento de la fachada y ahorrarles humedades al vecindario. De cuando en cuando es bueno un anuncio en la vida, si sobre todo nos deja algo de dinero en la cuenta vecinal. A su lado tres casitas bajas y antiguas, junto a un rascacielos enano, donde se alojan tres locales de hostelería, que son las modernas cuevas, donde se refugian los habitantes a salvo de las fieras del tráfico y las prisas, mientras degustan un café con tostada, cerveza, vino o un refresco. Dependiendo del día, la foto de este grupo de edificios cambia. Se abrazan las viviendas y sonríen cuando ven al fotógrafo disparar, posando coquetas. En un día gris, ellas son grises, en un día soleado muestras las luces y sombras de la ciudad. Un poco más adelante se mezclan más casas nacidas en distintas épocas. Todas estiradas y elegantes, aunque cada una con su porte único. Unas grandes, otras pequeñas. Una verde, otras rosa, otra con baldosas a rayas, otras con traje de hormigón. Sorprende también, como lo mismo, es diferente. Como las casas trillizas, nacidas a la vez, pasado el tiempo se diferencian tanto. Ellas son el reflejo de cómo han sido tratadas. Las tres casas han sido cuidadas, pasado el tiempo aún están habitadas y elegantes. La más afortunada, se casó con un dueño de dinero que la mantuvo. Que decidió renovar el tejado, la fachada y sustituir las viejas ventanas por nuevos ventanales aislados, que mantienen la estética, al tiempo que la modernizan. Parece un poco el juego de las diferencias. En estas tres imágenes busquen las diferencias. Las principales son sus poseedores y cómo las cuidaron. Cuáles fueron sus sueños y el dinero disponible para hacerlos realidad. Es curioso observar, como a lo largo de la calle se mezcla lo antiguo con lo moderno. Cuando una casa muere, los albañiles y arquitectos la sustituyen, pero si la casa es orgullosa, como sus dueños, la respetan. En la construcción también es importante el valor para defender el espacio propio, solo te respetan si te haces respetar, no se regala ese don, se gana. Si las casas ancianas se mantienen firmes, se las venera. “¡Cómo está de guapa y con más de 100 años!, se admira el moderno edificio de fachada de losetas de piedra y amplios ventanales”. “Hay hijo, es pura fachada, me duelen las vigas todas las mañanas al despertar, se sincera la unifamiliar adquirida recientemente por un abogado de Lisboa, con mujer y dos niños, que le han trasladado a los juzgados de Oporto”. Entre el vecindario de casas de la Avenida Boavista también está la nobleza y los grandes señores. Con casas a su medida, enormes, con lago, con especies raras, como ellos mismos que son algo extraño entre el promedio de gentes con más carencias que posesiones. Aunque alguna de esas mansiones, viendo los desconchones y el jardín demasiado crecido, dan la impresión de un cierto abandono con glamour, de una decadencia elegante, que habiendo llegado tan alto, y con una caída tan lenta y armoniosa, más que empobrecerse parece que se hacen menos ricos, y que sus cuentas y sangres azules se pasan al color rojo más habitual en la mayoría, no por arruinarse, sino por cambiar de tonalidad en la cuenta bancaria a una más en moda. Es al fin y al cabo, un ejercicio democrático de mezclarse con la plebe, y ser uno más… de los que llegan a fin de mes el día 16. Como la calle Boavista es larga en longitud y en vida, tiene un poco de todo, y también tiene edificios modernos y funcionales. En la variedad está el gusto. Tiene esos rascacielos de verdad, con muchos pisos, escoltados por otros más bajos, para que no se sientan solos, y con unos árboles enormes, que sirven para minimizar el impacto de los grandes edificios en la ciudad, y para quitar sol y vistas a parte del vecindario, que llegó tarde al reparto y no pudo elegir una orientación mejor. Me parece un acierto que esos baobabs gigantes adornen la ciudad, la purifiquen, y den una estética de selva civilizada, de jardín botánico de ladrillos y hojas, sugiriendo que lo mismo pueden crecer edificios de muchas plantas y plantas en muchos edificios. Es una suerte de igualdad entre lo natural y lo artificial, que no conviene mentar, a quien tenga frente a su ventana al árbol hogar de pájaros, donde cada primavera anidan unas aves escandalosas. Aunque, al fin y al cabo, acabas acostumbrándote. Ciertamente, una calle tan emblemática como Boavista, tiene un poco de las calles de otras ciudades del mundo, y de varias épocas. Tiene el Nueva York del XXI con sus McDonald’s de camareros con granos. Los cafés parisinos de la bohemia de mediados del XIX, con estudiantes de bellas artes incansables a la hora de explicar sus obras y camareros furiosos porque llevan toda la tarde con un café. La prehistoria con neandertales gruñéndose los unos a los otros y peleando por la morena, que sabiamente decide pasarse de acera y época y esquivarlos por muy monos que sean. Boavista une el centro de Oporto con la periferia; enlaza distintas épocas en esta, pone en simbiosis a personas, viviendas y coches, en un equilibrio difícil pero necesario. La avenida sabe, que hay un sitio para todos y que todos tienen su sitio en el día a día de Boavista.
Puertas con luces y sombras
7 Oct. 17
Hay puertas con luces y sombras. Que son una invitación a entrar aunque se encuentren cerradas. Con tentadoras aldabas doradas, que al golpearlas llaman a la fortuna.
Las puertas de grana y oro suenan a lenguaje taurino, a bellezas eternas cubiertas por el polvo del olvido, a Inglaterra victoriana derrotada: recuerdan a un mundo antiguo que se va apagando. La piedra evoca la solidez, el dorado a la riqueza, el 7 a la fortuna indispensable para triunfar en cualquier empresa. Así queda claro que es un portal refugio que asegura el bienestar y bienvivir a sus inquilinos, salvándolos de los tiempos modernos y locos. Los negocios que se cobijan tras las puertas rojas , leídos en las placas brillantes de oro parece, son como apariciones, como fantasmas decimonónicos que deambulan en el mundo ultraconectado a ninguna parte de la modernidad. Hay procuradores de felicidad con la ballesta de la ley como arma, que se anuncian como abogados. Pitonisos que ven el futuro negro con precisión nanométrica y venden planes de pensiones para contrarrestar las penurias. Odontólogos ilustres, que son la puerta de entrada al estómago. Bien leído, un anuncio es un lema para cambiar la vida: "Una buena masticación evita úlceras de estómago", es en realidad el mensaje oculto grabado en la placa dorada.
Suele ser que detrás de una puerta cerrada se esconde el misterio, y la imaginación se guarda a la sombra a salvo de una luz que explicaría todo mejor. Las puertas rojas con apliques dorados, añaden a esto: glamour, belleza y homenaje a tiempos pasados. El sábado sin prisas y la tediosa realidad hacen el resto, de cuando en cuando conviene jugar a imaginar que la realidad es un mundo fantástico y mejor.
Las puertas de grana y oro suenan a lenguaje taurino, a bellezas eternas cubiertas por el polvo del olvido, a Inglaterra victoriana derrotada: recuerdan a un mundo antiguo que se va apagando. La piedra evoca la solidez, el dorado a la riqueza, el 7 a la fortuna indispensable para triunfar en cualquier empresa. Así queda claro que es un portal refugio que asegura el bienestar y bienvivir a sus inquilinos, salvándolos de los tiempos modernos y locos. Los negocios que se cobijan tras las puertas rojas , leídos en las placas brillantes de oro parece, son como apariciones, como fantasmas decimonónicos que deambulan en el mundo ultraconectado a ninguna parte de la modernidad. Hay procuradores de felicidad con la ballesta de la ley como arma, que se anuncian como abogados. Pitonisos que ven el futuro negro con precisión nanométrica y venden planes de pensiones para contrarrestar las penurias. Odontólogos ilustres, que son la puerta de entrada al estómago. Bien leído, un anuncio es un lema para cambiar la vida: "Una buena masticación evita úlceras de estómago", es en realidad el mensaje oculto grabado en la placa dorada.
Suele ser que detrás de una puerta cerrada se esconde el misterio, y la imaginación se guarda a la sombra a salvo de una luz que explicaría todo mejor. Las puertas rojas con apliques dorados, añaden a esto: glamour, belleza y homenaje a tiempos pasados. El sábado sin prisas y la tediosa realidad hacen el resto, de cuando en cuando conviene jugar a imaginar que la realidad es un mundo fantástico y mejor.
Playa de la Arnía, Cantrabria
5 OCT. 17
Playa de la Arnía, Cantabria. 5 Oct. 17
Mirando al cielo
4 julio 2017
Miraba al cielo abstraido. En ese nudo de pensamientos, que en lugar de resolver los problemas los enredan aún más. Pasó una gaviota y desenfundé mi cámara. La parsimonia no es buena consejera cuando las oportunidades pasan volando. Por eso el cielo se quedó sin ese vuelo a contraluz. Pero coño -tiene que haber un exabrupto cuando se descubre algo importante-, ¡qué cielo al óleo! A veces, perder un vuelo, supone encontrar el cielo, ese que no veías por tener la mente en otro sitio.
Dunas de Liencres, Cantabria.
Dunas de Liencres, Cantabria.
Hay días en los que la lluvia va por dentro
3 junio 2017
Hay días en los que la lluvia va por dentro. La tormenta de negros nubarrones se sitúa donde deberían estar las ideas y los pensamientos. Desde allí precipita empapando al cuerpo desde dentro. Cae inundando pensamientos, sentimientos, emociones. Humedece las conductas que se tornan lentas y oxidadas. Cala los músculos reblandeciéndolos y se filtra por los huesos llenándolos de reuma. Cuando el aguacero interno es muy fuerte y continuado, es el abril subcutaneo de aguas mil. Así la meteorología interna suministra líquido para rellenar los pantanos del alma, que proporcionaran caudal para los momentos de ardiente sol. Dentro, como fuera, hay estaciones. De invierno y verano, de tren, de esquí. Hay voces, gente, recuerdos, planes de futuro. Cuando llueve fuerte por dentro, hasta se llegan a empapar las gafas. Los aguaceros salen por las ventanas regando los cristales y las miradas.
Fuente Dé (Cantabria)
26 Marzo 2017
Osos
23 Sep. 2016
Los vi a lo lejos, perfilados en las luces del atardecer y con los árboles al fondo. Me acerqué con cuidado, enfoqué cuidadosamente, y disparé con la cámara. Pasada la emoción del momento me di cuenta de lo peligroso de la situación. Una enorme mole se aproximaba a mi izquierda. Apenas me dio tiempo a esquivarla. Era el autobús de línea, que se alejó pasando muy cerca de mí. Con un chófer ojiplático y unos pasajeros de nariz pegada a las ventanillas. Es que sacar fotos con el móvil a las estatuas de la glorieta General Dávila de Santander, más conocida por la rotonda de los osos, tiene los peligros del salvaje tráfico urbano, donde cualquier bestia con ruedas, o su conductor, pueden darte un zarpazo.
Una copa de sol y sombra
La caracola de la casa expropiada
La babosa es una caracola a la que le han quitado la casa. Vivió por encima de sus posibilidades, jaleada por los buenos tiempos, y su cuerpo se agigantó por los excesos. Luego, y sin previo aviso, llegó el desplome. Se quedó sin trabajo y el banco le expropió su concha: mañana la subasta. Así, la supercaracola crecida por lo mucho, se arrastra babuda y lánguida. Cuando alguien le pregunta por su tristeza, muestra una foto en la playa con su tipito envidiable de delgada espiral. Junto a ella, un musculoso caracol que sacaba sus cuernos al sol y unos enormes helados de col de Bruselas. Tras de ellos, una preciosa carroza tirada por ratones blancos y conducida por cantores grillos negros que entonaban el "Only you". Era su época dorada, los años de Bonanza en la tele, los tiempos bíblicos de las vacas bien alimentadas. Ahora, el péndulo está en el otro extremo, la balanza ha cambiado, y la moneda exhibe su lado oscuro con sonrisa desdentada. La caracola sufre su particular metalmorfosis, esa donde a una la transforman a base de puñaladas aceradas, y acaba babosa. Tenemos los ojos llorosos de crisis. Hasta el paseo de un animalito arrastrando su cuerpo serrano, nos parece una foto fiel de la situación económica. De la banca traidora, de los políticos incapaces y de los nadie acusados como culpables y condenados a pagar las culpas de otros. Nunca fue bueno caracolear perezosa e inocentemente, ahora lo sabemos.
la_caracola_de_la_casa_expropiada_fotos_inmviles_josesanzsaez.weebly.pdf | |
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Los pájaros y el banco
Banco Español de Crédito. Era pronto y sólo un pájaro sobrevolaba el edificio. Poco después, llegarían más aves al lugar. Un pájaro bobo, con ínfulas de dirigir la institución, cuando son otros quienes lo hacen. Dos cuervos de negro traje, llegados en vuelo desde Alemania, revisando todos los libros de cuentas. La gallina Caponata, que le entró un apretón y fue a poner un huevo al baño. También llegarían a las 12, varias gaviotas, para rimar con el consejo de dirección y no hacerlo madrugar. Dos docenas de buitres leonados, esto es 32: no saben de cuentas pero algo picarán. Una bandada de buitres de a pie, sin leonar y carroñeros ellos, para merendarse a quien fallezca de infarto o quien se quede quieto mucho tiempo anonadado por la situación. Se verá también por allí, a varios gansos de control de cuentas, a algunos patos para meter la pata, a varios pingüinos con esmoquin como decorado fastuoso. Además, estará un flamenco de atención al cliente, para dar la nota y las palmas a sus jefes. Y a última hora, y cerrando el plantel, llegará un loro venerable del departamento de prensa. Repetirá todo lo oído sin comprenderlo, a sus colegas los plumillas de la prensa económica, para que desinformen al respetable. Si es que Banca y pájaros siempre han anidado juntos.
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Crisis Leonina
La economía es una ciencia infusa que hace malabarismos entre gastos e ingresos, entre activos y pasivos. Así como en el fútbol, para ganar conviene meter más goles que el contrario, en la economía conviene ganar más y gastar menos. Fácil. Como ciencia infusa, infusión ella, se sirve muy caliente y en taza grande. Así, a los que tienen les arregla los males endulzándolos y a los que carecen les sabe a cuerno quemado y los amarga. Principalmente, porque son los últimos quienes pagan la ronda a base de más impuestos, menos sueldo y más pánico del acostumbrado, que ya es mucho. Hoy han decidido subir el IVA, bajar las prestaciones del paro, cerrar empresas públicas y quitar la paga de Navidad a los funcionarios. Fácil: aumentar ingresos y reducir gastos. Así, que al pobre león de Correos se le ha torcido el gesto. Él, que por un puesto fijo se cortó la melena, abandonó lo salvaje por una reserva protegida, y consintió que le metan cartas en la boca, está indignado. Los demás, en el mercado libre e indómito, estamos acongojados, viendo un futuro más negro aún que el pasado negro zaino. Cuando las melenas de los funcionarios veas pelar... prepárate a defender tus alopecias.
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Muñeco inflable, sexo ardiente
Compró un muñeco inflamable para tener sexo ardiente. Hinchable, dijo el dependiente, tras coger el dinero, pero él no lo oyó. Sus padres lo descubrieron con su amante, atraídos por el extraño fiu fiu fiu que salía de la habitación. El hijo, pillado in fraganti, alegó: "Después del amor lo guardaré en una maleta y nadie sabrá nada". El padre pensó en una concubina que no le hiciera barrer ni le echara la bronca, solo folleteo, y le pareció bien. La madre pensó que a ella también la encerraban en una maleta acabado el acto. El hijo no pensó, lo mismo que cuando compró el muñeco en el Toy R Us en lugar de un sex shop. En el desayuno del día siguiente no hubo reproches, bastantes trae la vida, pero cuando el hijo expelió una ventosidad disimulada, el padre añadió irónico: "¿No estarás embarazado, ya tomas precauciones?".
mueco_inflamable_sexo_ardiente_fotos_inmviles_josesanzsaez.weebly.pdf | |
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Vino: mucho más que una copa
Desde quien lo produce, hasta quien toma una copa de vino, hay un proceso complejo y orquestado. Muchas personas trabajan para conseguir que el paladar del cliente disfrute de un producto bien elaborado y que supone una industria importante y en expansión. La sombra del vino, esa parte menos brillante y cargada de sudor y trabajo, es alargada y complementa el placer de quien sabe degustar un buen vino.
Amanece que no es poco
Plantas Rascacielos
Briviesca 27 agosto 2014
Briviesca 27 agosto 2014
Fue echar abono del chino a los rosales y las plantas empezaron a crecer a toda velocidad. Primero subieron más alto que Antonio, que alucinado leyó las instrucciones del producto por si había hecho algo mal. Después pasaron el balcón de la beata Luisa, la del segundo izquierda, que dijo "Coño" y salió corriendo a confesarse. Y cinco minutos después, los rosales superaban el sexto piso de unos edificios en construcción. De donde un albañil cayó al vacío, en parte por el susto, la dos copas y el canuto de después de comer y la ausencia del arnés de seguridad.
Cuando las plantas detuvieron su mágico crecimiento, entorno a Antonio y su rosal había un grupo numeroso. Estaban dos dotaciones de bomberos. Un policía municipal en prácticas, apuntando a la planta con su arma reglamentaria. Dos guardias civiles con restos de café con leche aún en los labios, y que aprovecharon para echar un cigarrito. También había 305,7 vecinos, según un estudio estadístico posterior de dudosa fiabilidad, y 20 escolares de excursión con su maestra. La cual, aprovechando el maravilloso ejemplo, disertaba sobre la fotosíntesis y las grandezas del mundo vegetal, sin que nadie la atendiera. Además, como no puede ser de otra manera cuando sucede un milagro de la naturaleza, también estaba don Genaro el cura, avisado del hecho sobrenatural por la beata Luisa. Al llegar el alcalde al rosal de Antonio, resolutivo, llamó por teléfono a Chan Pu, el dueño del todo a cien donde se había comprado el abono. Después de varios sies, algún no, muchos joder y coño y varios aspavientos colgó el móvil.
El edil, que no se arrugaba fácilmente, improvisando un escenario se subió a una caja de San Miguel y se dirigió a los congregados que ya eran multitud:
-Ciudadanos, como alcalde vuestro que soy os debo una explicación, como dijeron al recibir a Mr. Marshall. El tonto del chino, el señor Chan Pu, ha mezclado el abono con un producto que no vendía. Era un crecepelo, que las primeras semanas hacía crecer los pelos que tuvieras, cuatro o cuatro mil, para dos días después quemar la nueva melena hasta sus raices más profundas. Ahora ya sabéis porque el comerciante oriental perdió la melena con cortinilla que lucía al llegar. Así que: hacer las fotos que queráis, que al jardín de Antonio le saldrán calvas en breve. He dicho.
Cuando las plantas detuvieron su mágico crecimiento, entorno a Antonio y su rosal había un grupo numeroso. Estaban dos dotaciones de bomberos. Un policía municipal en prácticas, apuntando a la planta con su arma reglamentaria. Dos guardias civiles con restos de café con leche aún en los labios, y que aprovecharon para echar un cigarrito. También había 305,7 vecinos, según un estudio estadístico posterior de dudosa fiabilidad, y 20 escolares de excursión con su maestra. La cual, aprovechando el maravilloso ejemplo, disertaba sobre la fotosíntesis y las grandezas del mundo vegetal, sin que nadie la atendiera. Además, como no puede ser de otra manera cuando sucede un milagro de la naturaleza, también estaba don Genaro el cura, avisado del hecho sobrenatural por la beata Luisa. Al llegar el alcalde al rosal de Antonio, resolutivo, llamó por teléfono a Chan Pu, el dueño del todo a cien donde se había comprado el abono. Después de varios sies, algún no, muchos joder y coño y varios aspavientos colgó el móvil.
El edil, que no se arrugaba fácilmente, improvisando un escenario se subió a una caja de San Miguel y se dirigió a los congregados que ya eran multitud:
-Ciudadanos, como alcalde vuestro que soy os debo una explicación, como dijeron al recibir a Mr. Marshall. El tonto del chino, el señor Chan Pu, ha mezclado el abono con un producto que no vendía. Era un crecepelo, que las primeras semanas hacía crecer los pelos que tuvieras, cuatro o cuatro mil, para dos días después quemar la nueva melena hasta sus raices más profundas. Ahora ya sabéis porque el comerciante oriental perdió la melena con cortinilla que lucía al llegar. Así que: hacer las fotos que queráis, que al jardín de Antonio le saldrán calvas en breve. He dicho.
Pueblos clásicos, moto clásica
Para ir a los pueblos antiguos -esos de casas bajas, campos, iglesia y con los más jóvenes de 60 años en el invierno-; hace falta un vehículo apropiado. ¿Se podría ir en Audi del 2014? Sí, claro, pero... no es lo mismo. Mucho mejor en una moto clásica; venida de Alemania para más señas. De nombre extranjero: DKW; y nacida del mayor productor mundial de motocicletas en los años 30. Quien la matriculó en 1958 se quedó encantado de ver los progresos de la técnica, y 56 años después sigue causando admiración verla impecable y en funcionamiento.
Para ir a los pueblos antiguos -esos de casas bajas, campos, iglesia y con los más jóvenes de 60 años en el invierno-; hace falta un vehículo apropiado. ¿Se podría ir en Audi del 2014? Sí, claro, pero... no es lo mismo. Mucho mejor en una moto clásica; venida de Alemania para más señas. De nombre extranjero: DKW; y nacida del mayor productor mundial de motocicletas en los años 30. Quien la matriculó en 1958 se quedó encantado de ver los progresos de la técnica, y 56 años después sigue causando admiración verla impecable y en funcionamiento.
Moto DKW matriculada en 1958. Briviesca (Burgos) 30 julio 2014
Como pez en el agua
- En esta empresa estará como pez en el agua -dijo campechano el orondo empresario al nuevo trabajador.
Y así fue, hicieron sopa con él y se encontró como pez en el agua. La empresa siguió contratando empleados, que enseguida se sintieron integrados en sus respectivas áreas. Con unos hicieron caldo, con otros paté, con otros pienso para ganado y con los más valientes... flan de huevo. El empresario, sincerándose y un tanto afligido, comentó con su contable:
- Hombre, esto no es plato de gusto para mí, pero, el pez grande siempre se comió al chico y el chico no pudo decir nada.
Volando a ver a mi amada
Monté en mi avión de papel y fui volando a visitar a mi amada. La lluvia frustró mi vuelo y acabé en el suelo con fractura de fémur y contusiones diversas. Las precipitaciones precipitaron mi vuelo al molesto asfalto, desde una altura considerable. En el hospital, leyendo las instrucciones del avión de papel, por pasar el rato, descubrí que el aparato de papel, el aeroplano construido de hoja plana, no lo recomendaban para días con pluviometría leve y mucho menos con precipitaciones intensas. Si lo llego a leer antes, hubiera llevado casco, paraguas y chubasquero. Me niego a que un aguacero me impida salir volando a ver a mi amada.
Piedras Secas de Arriba
El alcalde y la concejala de urbanismo de Piedras Secas de Arriba, siguen con su plan de convertir a su pueblo en un centro turístico de alcance internacional. Con 30 habitantes y en el desierto aragonés de los Monegros, pretenden hacer una nueva Venecia inundando las calles de la aldea. Descartaron la idea de un aeropuerto por poco realista; pero con un "pamí que se pue hacel", aprobaron el Plan Estratégico de Promoción Turística Internacional de Piedras Secas de Arriba. Edil y concejala, sabiendo que más vale maña que fuerza, y siendo ella aragonesa, llevan dos semanas en Venecia estudiando la viabilidad del proyecto y tomando las fotos preliminares. Los abnegados munícipes, están dispuestos a sacrificarse el tiempo necesario en la Ciudad de los Canales, para que el proyecto llegue a buen puerto. Son sin duda, un ejemplo a seguir para todos aquellos que quieran entrar en la sacrificada política municipal.
Sed
El avispado libando la flor
Abajo a la derecha, escondido sin esconderse, un avispado liba a una flor que empieza a brotar. La madre naturaleza, preocupada porque no la desfloren antes de tiempo, mira atenta. Deja hacer, porque ella sabe que es normal, pero vigila. No contará nada al padre natural, ese que compró una escopeta al nacer su retoño, para que no arme la tercera guerra mundial antes de acabar la tarde. El padre prometió cortar el aguijón a todo avispado que se quede parado junto a su flor. Prometió disparar a bocajarro, con perdigón lobero, a todo joven o abuelo que se acerque al fruto de su semilla. En el tiesto, las hierbas de abajo, las flores nacientes, las florecientes y la sentenciadas, se ríen cuando no se las mira: la naturaleza tiene un curso que no se puede parar, tan solo cursar adecuadamente.
El hombre sentado en el café
El hombre sentado en el café tenía la mirada perdida. Sus ojos se posaban sobre la puerta del bar, pero no sabía si entraba o salía gente del local. Su mente estaba ocupada tratando de resolver un dilema que lo atormentaba. Una gota de sudor resbaló desde su frente al vacío vaso de café. De repente, se levantó con decisión, pagó y salió raudo; vigilando para que no lo siguieran. Había matado la tarde en el bar y no quería que nadie pudiera acusarlo.
La casa del terror
Los claroscuros del mundo inmobiliario ponen los pelos de punta. ¡Cómo no van a dar pánico si recuerdan a la casa del terror! En cualquier momento sale un vampiro del banco, un hombre lobo reclamando el IBI para el ayuntamiento, o un franquestéin pidiendo una derrama para arreglar la fachada que el constructor, de parche en el ojo, nunca remató bien. La Construcción es de las barracas más terroríficas del parque de atracciones de la economía, al menos de las de acceso popular. Da pavor pensar en esas casetas cerradas, a las que se entra con pase VIP, como bancos, ministerios, empresas públicas, privadas y semiprivadas de sentido común. ¡¡¡¡¡Bufffffffffff!!!!! Eso sí que es terroríficamente rentable para ellos. En estas atracciones pululan las enredaderas venenosas, los laberintos imposibles, las arenas movedizas y los monstruos que te devoran la entrañas. ¡¡¡¡¡Qué miedo dan las casetas del terror!!!!!
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Bankia
A Bankia se le han torcido las cuentas. Viendo el edificio, se veía venir. Parecía que en 2011 había ganado 300 millones de euros, y en realidad había perdido 3.000. Podría ser, que al igual que el perro dicen que se parece a su amo, el banquero se parezca a su edificio. Y así, torciéndose la construcción, se tuerce el gestor de los ahorros de otros, y con él sus balances financiosos. Cómo sería el caso de sospechoso, que pusieron junto al edificio una regla bien recta y erguida, para que sirviera como guía. Así, la pareja de aparejadores que dirigía la obra, no tendría dudas. No obstante, ellos erre que erre, consiguieron torcer una institución que debería ser modelo de rectitud. No queda claro, si lo hicieron por error o buscaron curvar la obra faraónica para que sirviera mejor a las curvas del negocio bancario. Los edificios emblemáticos son sintomáticos. Cuando los bancos veas doblar, pon tus ahorros a guardar... bajo el colchón.
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El poético otoño
El otoño prepara unos versos a su amada. Como no encuentra las palabras justas, tira las hojas garabateadas. Torpe él, otro año pondrá el suelo perdido sin declarar su amor. Empieza romántico y acaba hasta los...
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Marcelino plantó un ladrillo...
Marcelino plantó un ladrillo en la huerta detrás de su casa. Elisa, su mujer, levantó la ceja y pensó que Marcelino se hacía mayor. El hombre, regó, abonó y, finalmente, nacieron 12 plantas de un rascacielos. "Coño, ¡qué arte tiene este hombre con la azada!", pensó Elisa. Vino una visita y le sorprendió la mezcla de estilos, lo rural y lo urbano compartiendo espacio en pleno siglo XXI. Elisa y Marcelino no hablaron de que todo había empezado plantando un ladrillo, para qué perder el tiempo dando explicaciones que no se van a creer, y siguieron tomando chacolí y queso con su invitado. Barrio de Zurbarán, Bilbao.
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El gato sobre el tejado...
El gato, joven y bravo, saltaba orgulloso de tejado en tejado. Vio uno alto alto y se dispuso a demostrar su vigor. Tensó los músculos, calculó la trayectoria y saltó hacia el tejado plano y alto muy alto. Cuando vio que no llegaba y caía al vacío, se acordó de las lecciones en la escuela de gatos. "No es lo mismo tejado que azotea, saltar por los accesibles tejados rojos y no os acerquéis a las imposibles azoteas negras", decía la maestra gata. Cuando el minino cayó al suelo, con cinco vidas menos de sus siete vidas, olvidó la lección. Es una pena la leve memoria de las buenas enseñanzas, cuando nos quedan juventudes que gastar. Zurbaranbarri, Bilbao.
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Un café con corazón
Ella le entregó su corazón mientras sonreía. Él añadió a este gesto toda la dulzura, todo el azúcar posible. Cuando la camarera dijo el precio del café, se apagó el romanticismo y brilló una breve tertulia de bar. Las realidades, incluso pequeñas, superan a los sueños imposibles.
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Complejos
Se busca psicólogo o psicóloga para importante ayuntamiento. Debe tratar complejos de evolución humana, complejos municipales y complejos polideportivos. Debe tratar de convencer a las autoridades, de que pongan nombres menos acomplejados.
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De noche todos los gatos son...
De noche, todos los pardos son gatos. Que buscan pescado fresco, y subirse por los tejados. Miau.
VERSOS ENLATADOS
Pescaditos con espinillas. Sardinas con acné. Alimento de vigilia. Enlatado en latón cuché.
Pescaditos con espinillas. Sardinas con acné. Alimento de vigilia. Enlatado en latón cuché.
Con g de greguería: Piedras en el calzado
Una piedra en el zapato es un problema a resolver o soportar. Muchas piedras en el calzado son un curso de autosuperación. O pulen nuestras asperezas o forman un epitafio.
Con g de greguería: Una puerta elegante
Tras una puerta bella y elegante uno cree que aparecerá una belleza glamurosa tras el toc toc. La imaginación se lleva bien con la inocencia.
Con g de greguería: El sol se apaga
Cuando el sol apaga su luz, la noche enciende sus misterios.
Flops, llega la primavera
Flops. Las florecillas brotan con sonoro brío, aunque aún, por las noches, hace frío. Como las alergias primaverales llega la poesia estacional. Conviene pertrecharse de pañuelos y paciencia.
Nubes de humo
Las fábricas sacan nubes de humo por las chimeneas. El corazón de la industria late agitado mientras sube la cuesta de la crisis. Obviaremos, que es en realidad un monumento a la industria, y que se suelen hacer monumentos a los fallecidos. Nos olvidaremos también, que de humo nada, son nubes que pasaban por allí y no salían de la chimenea. Pero salvo esos pequeños, pequeñísimos e ínfimos detalles, todo va bien. El sol sale puntual, la luna despierta pronto y las estrellas siguen clavadas con chinchetas en la bóveda celestial.
Donosti-San Sebastián
Cada lugar tiene su magia, pero hay sitios que parece que la concentran de una forma especial. San Sebastián-Donosti es uno de ellos. Plaza de la Constitución
¿Agua?
-Tiene que dejar de tomar alcohol inmediatamente, su hígado está destrozado -dijo el doctor con firmeza.
- ¿Y qué bebo? -preguntó el paciente abatido.
- Agua -afirmó el galeno.
- ¿Agua? Mire que me quiere sonar la palabra. Pero, realmente, no sé a que se refiere. Ustedes los médicos siempre con palabras técnicas.
El médico sacó una foto del líquido elemento y se la mostró al paciente. Éste sonrió y dijo: "Ahora le entiendo doctor, desde hoy solo beberé ginebra, el limón y el Kas eran los que me hacían mal".
- ¿Y qué bebo? -preguntó el paciente abatido.
- Agua -afirmó el galeno.
- ¿Agua? Mire que me quiere sonar la palabra. Pero, realmente, no sé a que se refiere. Ustedes los médicos siempre con palabras técnicas.
El médico sacó una foto del líquido elemento y se la mostró al paciente. Éste sonrió y dijo: "Ahora le entiendo doctor, desde hoy solo beberé ginebra, el limón y el Kas eran los que me hacían mal".
A flor de piel
El dermatólogo observó la piel del paciente. "¿Es grave tronco?", dijo el 'impaciente' visiblemente nervioso al médico. "Se casa pronto, ¿verdad?", dijo el doctor con ojo clínico. "Así es, voy a echar raíces, ¿tiene eso algo que ver?", dijo el enfermo. El galeno miró de frente al sujeto y le espetó sin miramientos: "Usted es más tonto que un árbol y se está mutando en éste por echar raíces, tenga cuidado con las plagas. ¡El siguiente!".
La máquina del tiempo
Los días de niebla se abren ventanas a través del tiempo. Con pequeñas distorsiones, nos muestran imágenes de muchos años atrás. Puente de Alcántara, Toledo.
La nueva jefa del supermercado
La nueva jefa del supermercado llegó con una sonrisa enorme. Al tiempo que se presentaba, plantaba a los empleados dos sonoros besos y un fuerte abrazo. Parecía más a la tía del pueblo, amorosa y cariñosamente exagerada, que a una gerente profesional. Sin embargo, en la cercanía necesaria para el beso, todos pudimos ver que su piel estaba compuesta por pequeñas y pétreas losas que con la distancia no se apreciaban. Un temblor recorrió nuestra espalda y cabizbajos asumimos que los buenos tiempos habían llegado a su fin.
Reflejos
Los reflejos de una imagen en el agua, son una forma artística de hacer una fotografía. No hace falta un programa de retoque, tan solo usar las posibilidades de la propia toma. Torre de la iglesia de Durango.
Ciudades de agua
En torno al agua crece la vida. Es el lugar natural para un asentamiento humano importante. Agua para beber hombres y ganado, para regar. Agua para usos industriales, para comunicaciones allá donde sea posible la navegación. Agua con peces, antes fuente de alimento hoy de ocio. Las ciudades de agua son ciudades con vida. Durango.
Por fin viernes: ¡fin de semana!
Por fin viernes: ¡fin de semana! Uhmmmm, que postre tan rico.
La plaza: lugar de paz
La plaza es ese sitio de paz donde pasear, ver escaparates o tomar unos vinos, se puede hacer a salvo del tráfico.Todo un logro en la selva de los autos locos que son las ciudades. Cada vez más, la arquitectura urbana trata de recuperar estos espacios.
Paseo otoñal 1
Las cámaras de los móviles empiezan a dar juego y dejan hacer fotos fotos. Bien. Permiten dejar recuerdo de un paseo otoñal. Aranda de Duero.
Fotos en el acto
Entró con su señora en el estudio y se hizo una foto de carné en el acto... sexual. Siempre que la policía le pedía el carné lo enseñaba orgulloso. Hay anuncios ante los que uno no puede resistirse... a jugar con su enunciado.
Agua en el lluvioso domingo
Las gotas de agua del lluvioso domingo decidieron tomarse un descanso en la terraza del bar. Se esparcieron sin prisa y se juntaron en corrillos con formas caprichosas. Después del descanso, y empujadas por el camarero al inclinar la mesa, siguieron con su trabajo. Ordenadas, desfilaron primero por el suelo y después por las cañerías para llegar al mar que es el morir.
El genio de la botella
Es un licor de arroz con paladar de canela. Pero vestido de oro, parece más una cara esencia de origen parisino. El márqueting, le añade precio adornando la botella. Las formas son importantes y rentables. Todo un genio el de la idea de la botellita glamourosa.
Paseo al atardecer
Hay momentos en que lo sencillo tiene una belleza especial. La luz del atardecer viste de color y encanto, al porte espinado del prejuzgado cardo. Cada belleza, grande o pequeña, tiene su lugar bajo la capa del cielo azul.
Si es que van como locos
Es un trucaje pero parece verdad. Los sentidos, y más los de una cámara, a veces nos engañan. Paradojas de la fotografía: unas veces capta la realidad y otras... la distorsiona.
Una mañana de pelicula
La luz moldea la realidad y puede influir sobre cómo percibimos las cosas. El cine, que es la literatura moderna y fácil de leer, refuerza la idea de la luz como elemento expresivo, que puede añadir romanticismo a una escena. Así, una mañana cotidiana, se transforma con la luz en una mañana de cine, donde el protagonista es uno mismo.
La cafetería acababa de abrir
La cafetería acababa de abrir. Era un local tranquilo, donde se conoce lo que toman los clientes habituales. Donde los clientes acaban por ser amigos y compañeros de tertulia. A cambio de unas monedas, aportaba consumiciones, un local agradable y saciaba soledades. A las 9:01 entró el primer cliente.
-Hola, ponme un gintónic... con leche.
La camarera levantó la cara sorprendida:
-Ja ja ja -rió con ganas-. Te pongo tu café con leche. Me has pillado un poco despistada. Es el primer... 'gintónic' que pongo en la mañana.
-Hola, ponme un gintónic... con leche.
La camarera levantó la cara sorprendida:
-Ja ja ja -rió con ganas-. Te pongo tu café con leche. Me has pillado un poco despistada. Es el primer... 'gintónic' que pongo en la mañana.
Desconfiaba hasta de su sombra
Miraba las esquelas para ver si se había muerto. Uno solo está seguro de su muerte cuando se ve en las esquelas. Desconfiaba hasta de su sombra, así que su sombra lo abandonó, y no volvió a ser el mismo. Uno es lo que es, por sus luces y por sus sombras. Si falta alguna de ellas, ya nada es igual.
Hoy puede salir el sol
Viendo el sol sobre el tejado me acordé de Leño, la mítica banda madrileña de rock. Y durante todo el día he tenido la melodía de 'Hoy puede salir el sol'. Un temazo.
Receta para una postal
Playa, móvil con cámara, gafa de sol y claros y nubes. Se coge el móvil, se le pone delante de la lente de la cámara uno de los cristales de las gafas de sol y se dispara. Queda una postal fácil fácil y rica rica.
Grietas y tiritas
Puede resultar difícil de creer, pero a pocos centímetros de la grieta en el pavimento, había una tirita. El juego está servido. Parece que el caprichoso azar, encontró adecuado tratar de resolver la fractura del suelo, con una tirita. Y ésta, incapaz de aguantar tan difícil reto, saltó agotada a un lado, exhausta por el esfuerzo. "¡¡¡Las grandes grietas no se solucionan con tiritas!!!", parece gritar en silencio la imagen. Pero se hace necesario insistir en lo evidente, a la vista de cómo la Política trata las grandes fracturas con pequeñas tiritas.